Como ya habéis podido ver en facebook el pasado fin de semana preparé los rollitos de canela que Alma Obregón mostró en el programa Cupcake Maniacs y he de confesar que no he podido comer otra cosa mientras aún quedaban.
¿Y por qué esta fijación con los rollos de canela? Pues veréis, estábamos visitando a unos buenos amigos en Reino Unido y en la visita a Londres, en pleno Picadilly Circus un increíble aroma a canela me asaltó en plena calle. Si hubiera podido, hubiera volado con cara embelesada tras ese aroma hasta su fuente, rollo dibujos animados, pero como no sé volar, me tuve que conformar con caminar y buscar de dónde provenía ese fantástico olor. Mmm...
Como era hora de comer, mis acompañantes (que no pueden entender mi facilidad para sucumbir al dulce) me indicaron que mejor probarlos en otro momento, así que me tocó esperar hasta .. ¡el postre! no pedí nada de postre en el restaurante y nada más salir del mismo les hice volver sobre nuestros pasos (no estábamos muy lejos) para comprar los rollitos de canela. ¡Me encantaron! Y pasaron a formar parte del viaje, siendo uno de los muchos recuerdos agradables y fantásticos que generamos.
Y ahí quedaron en mi mente, como en segundo plano, a la espera de hacerlos emergir al primero y entonces... veo que es la receta que Alma Obregón va a preparar en el programa de Divinity. Y lo tengo claro. No es casualidad. Debo prepararlos, no hay duda. Y el domingo me puse manos a la obra. ¡Estaba tan contenta!
No es una receta complicada, pero incluye tiempos de espera de fermentación, así que hay que tener tiempo y paciencia.
Os iba a preparar un tutorial con fotos, pero lo mejor es que veáis el programa directamente des de este link: Cupcake Maniacs. Rollos de canela de Alma Obregón ¡Lo explica fenomenal!
Yo seguí las explicaciones al pie de la letra y me fui apañando bien, aunque tuve que acabar trabajando la masa a mano, ya que llegó un momento en el que mi batidora no podía con ella. Obviamente no tengo una súper fantabulosa Kitchen Aid... Pero con las manos enharinadas la fui trabajando hasta que casi no estaba nada pegajosa.
La cosa se me complicó en el momento de extender la masa en un cuadrado de 30x30. A mi me salió más bien de 50x15... pero seguí adelante y lo que obtuve fueron más rollos de canela aunque más bajitos. He de practicar lo de amasar con rodillo, no es mi fuerte...
Por lo demás todo bien, aunque descubrí que en mi horno, como la parte de arriba siempre es grill (no tiene más opciones de calor arriba) con 170º es suficiente para hornearlos, por ese motivo la primera hornada me salió más tostadita...
Para la segunda, ya había bajado la temperatura del horno y como véis quedó mejor.
El glaseado les da un toque dulce delicioso que no puede faltar. En mi caso, como me salieron dos fuentes (por la extensión de la masa que hice) repartí la cantidad de glaseado entre las dos, pero creo firmemente que no se debe hacer eso. Extra de glaseado , ¡eso es lo mejor!
¡Ah! Y lo mejor es comerlos recién horneados, según pasan los días van perdiendo jugosidad. Lo cierto es que no he dejado pasar muchos días, pero ya se notaba que no estaban tan ricos. En el libro Objetivo: Tarta perfecta Alma comenta que se pueden dejar preparados en la bandeja y hornearlos al día siguiente.
Y nada, animaros a prepararlos porque están muy ricos y ¡todo acaba oliendo a canela!
Mi marido me ha sugerido que encuentre la manera de incluir el chocolate en esta receta y voy a pensarlo seriamente porque ya sería ¡la bomba!
Y aquí acaban mis aventurillas con los rollos de canela...
¡Hasta la próxima!
Mare de deu senyor! or OMG!! Estic segura que aquests estan molt millors!!! ara a per les cookies que vam menjar al peu del London Bridge!! :)
ResponderEliminar¡Mmmm qué ricas estaban! ¡ Tendré que buscar la receta!
ResponderEliminarMmm Natalia, es una receta que tengo pendiente hacer desde hace mil. La canela es mi obsesión y siempre babeo cuando veo que alguien los hace. ¡Qué buena pinta! :)
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